Propiedades antioxidantes: Contienen antioxidantes como flavonoides y limonoides, que ayudan a combatir el daño de los radicales libres en el cuerpo, contribuyendo así a la prevención de enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Apoyo a la digestión: El jugo de limón estimula la producción de saliva y los jugos gástricos, lo que puede ayudar a mejorar la digestión y aliviar problemas como la indigestión y la acidez estomacal.
Pérdida de peso: Algunas investigaciones sugieren que los compuestos presentes en los limones, como la pectina y el ácido cítrico, pueden ayudar a reducir la sensación de hambre y a controlar el peso.
Propiedades antibacterianas: El ácido cítrico en los limones tiene propiedades antibacterianas que pueden ayudar a combatir bacterias dañinas en el cuerpo y a mantener una buena salud bucal.