Instrucciones

Exprimir los limones. Procurando desechar las semillas.

Mezcla el jugo del limón con la miel, revuelve y reserva esta preparación. También puedes utilizar para endulzar la mezcla azúcar o tu endulzante favorito.

Lava y pela los lichis sacando la pulpa de su interior coloca en la licuadora los lichis junto con el agua triturando al máximo asegurándote que no queden trozos grandes de fruta.

Pasa este jugo por un colador exprimiendo al máximo el zumo o bagazo que quede de fruta. La idea es conseguir una limonada homogénea y que no contenga trozos de fruta.

Mezcla las dos preparaciones, el jugo de lichis con el de limón y miel, y vuelve a licuar todo de nuevo. En este punto es bueno que pruebes la limonada para asegurarte que tiene el dulzor correcto.

Prepara un par de vasos con mucho hielo y sirve la limonada de lichis para refrescar un caluroso día de verano.